
Nairo Quintana conocido ciclista vive actualmente en Mónaco donde afirma que vive tan bien como en su casa. También dice que se encuentra muy a gusto con sus entrenamientos en este país que, al ser europeo, le permite participar en competencias en ese continente y regresar rápidamente para recuperarse y descansar.
Disfruta además de las vista al mar que tiene desde su hogar y siempre que le es posible sale a pasear y a comer en los restaurantes de este Principado.
¿Cómo fue la vida de Nairo Quintana?
Nairo nació en Tunja, capital del departamento de Boyacá, vivió su infancia en la vereda La Concepción del municipio Cómbita. Es hijo de Luis Quintana y Eloísa Rojas, campesinos dedicados al comercio de sus productos agrícolas.
Cuando tenía 7 años de edad su padre sufrió un accidente automovilístico que provocó que debiera someterse a numerosas intervenciones quirúrgicas que poco pudieron hacer para evitarle una discapacidad en la cadera. Esto provocó que Nairo, su hermano Dayer y sus hermanas tuvieran que ayudar para contribuir a la economía del hogar.
El colegio de Nairo quedaba a 18 kilómetros de su casa y sus padres no se podían permitir pagar el transporte hacia el mismo, por lo que su padre le compro una bicicleta todoterreno que le permitía ejercer sus labores en la granja y acudir a clases.
A los 12 años Nairo iba y venía de su escuela en Arcabuco en bicicleta. Durante los cinco años que dura la secundaria Nairo subió y bajó las cuestas con todas las intenciones de acudir a clase. Tardaba 45 minutos en llegar mientras el transporte solo tardaba 15 minutos.
Este constante pedaleo sorprendía a los ciclistas profesionales que entrenaban en la zona al punto que su padre le compró una bicicleta de carreras con la que se enfrentó a Juan Pistolas, el ciclista del pueblo y le ganó sin lucir el equipamiento de este (Bicicleta especial, camiseta y pantalones de licra, guantes y casco) Por esta carrera el joven recibió el dinero de las apuestas y compro su primer casco.
Al hacerse conocido los alcaldes de Cómbita y Arcabuco le dieron su primer patrocinio para que comprara una bicicleta decente con la cual llegó a su primer club, Ediciones Mar, donde sorprendió a todos con los resultados de su prueba de esfuerzo.